Las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra de España han culminado un ambicioso proyecto de modernización de su flota de helicópteros Chinook, con la entrega del último de los 13 aparatos actualizados a la versión Foxtrot (F) por parte de Boeing. Este proyecto, que ha requerido una inversión de 800 millones de euros, no solo incluye la actualización de estas aeronaves, sino también la adquisición de cinco nuevos helicópteros, asegurando así la operatividad de esta flota emblemática hasta al menos el año 2050.
La historia de los Chinook en España se remonta a 1973, cuando el país se convirtió en el primer cliente internacional de este modelo, conocido por su uso en conflictos como la Guerra de Vietnam. Desde entonces, estos helicópteros han acumulado más de 70,000 horas de vuelo, convirtiéndose en un pilar fundamental para las operaciones de transporte aéreo del Ejército. La modernización a la versión Foxtrot representa un avance significativo en términos de tecnología y capacidades operativas, lo que permitirá a las Fuerzas Armadas españolas mantener un nivel de competitividad en el ámbito militar.
Una de las características más destacadas de la nueva versión Foxtrot es su capacidad de aterrizaje autónomo, gracias a sistemas avanzados de navegación y un piloto automático digital. Esto no solo mejora la seguridad en las operaciones, sino que también permite realizar vuelos estacionarios, considerados de alto riesgo, con una precisión sin precedentes. Además, la cabina del Chinook F ha sido completamente digitalizada, incorporando cinco pantallas que proporcionan información detallada sobre el entorno y las condiciones del helicóptero.
La modernización también ha incluido mejoras en la aviónica, con un 80% de cambios respecto a la versión anterior, y la utilización de materiales compuestos más ligeros y resistentes en la estructura del helicóptero. Esto se traduce en una reducción significativa de los costos de mantenimiento y una mayor vida operativa, ya que los nuevos Chinook deberán someterse a mantenimiento cada 320 horas de vuelo, en comparación con las 200 horas requeridas por la versión Delta.
Además, los nuevos Chinook F están equipados con un sistema de freno de rotor que mejora su capacidad para operar desde buques de la Armada, como el portaaviones LHD Juan Carlos I. Este sistema es crucial para controlar la inercia de la aeronave durante las operaciones de despegue y aterrizaje en condiciones marítimas. También se ha incorporado un sistema de autoprotección de última generación, desarrollado por la empresa Indra, que incluye el sistema de planeamiento de misión Talium, lo que refuerza aún más la capacidad operativa de estas aeronaves.
La modernización de los Chinook es parte de un esfuerzo más amplio del Ministerio de Defensa español para actualizar y mejorar la infraestructura y el equipamiento de las Fuerzas Armadas. En julio de 2023, se aprobó la ampliación de las instalaciones del Batallón de Helicópteros de Transporte (Bheltra) V, ubicado en la Base de Colmenar Viejo, donde se construirán nuevos hangares para albergar a las nuevas aeronaves. Este proyecto de ampliación tiene un costo estimado de casi 13 millones de euros y es un reflejo del compromiso del gobierno español con la modernización de sus capacidades militares.
La entrega del último Chinook F marca un hito importante en la historia de la aviación militar en España, asegurando que el Ejército de Tierra cuente con una flota de helicópteros de última generación, capaz de enfrentar los desafíos del futuro. Con la combinación de tecnología avanzada y un enfoque en la sostenibilidad operativa, el Ejército español se posiciona para mantener su relevancia en un entorno geopolítico en constante cambio.