El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su intención de reemplazar a Jerome Powell como presidente de la Reserva Federal (Fed) antes de que finalice el año. Esta declaración, realizada durante su gira asiática, ha reavivado el debate sobre la política monetaria y el futuro económico del país. Trump ha criticado abiertamente a Powell, a quien nombró en su primer mandato, calificándolo de «no inteligente» y acusándolo de obstaculizar el crecimiento económico al no reducir significativamente las tasas de interés.
La Reserva Federal, como banco central de EE.UU., juega un papel crucial en la regulación de la economía, y la elección de su presidente puede tener repercusiones significativas en la política monetaria y en los mercados financieros. Con el mandato de Powell concluyendo en mayo de 2026, la posibilidad de un cambio en la dirección de la Fed ha generado interés y especulación entre economistas y analistas.
**Candidatos a la Presidencia de la Fed**
Según el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, quien ha sido encargado por Trump de gestionar el proceso de selección, hay cinco candidatos principales para suceder a Powell. Estos incluyen a Christopher Waller y Michelle Bowman, ambos miembros actuales de la junta de la Fed, así como a Kevin Warsh, un exgobernador de la Fed. También se mencionan a Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, y Rick Rieder, un ejecutivo de BlackRock.
Bessent ha indicado que planea llevar a cabo una nueva ronda de entrevistas con los candidatos y espera presentar una lista definitiva al presidente después de la festividad de Acción de Gracias, que se celebra el 27 de noviembre. Esta selección es crucial, ya que el nuevo presidente de la Fed tendrá que enfrentar desafíos económicos significativos, incluyendo la inflación y un mercado laboral que muestra signos de desaceleración.
**La Reunión de la Reserva Federal**
En el contexto de estas especulaciones sobre el liderazgo de la Fed, se espera que la entidad realice una reunión este miércoles, donde se anticipa que se reduzcan las tasas de interés en un cuarto de punto, pasando del actual rango del 4% al 4.25%. Esta decisión se considera necesaria debido a una inflación que se ha mantenido en el 3% y a un mercado laboral que está comenzando a desacelerarse. La política monetaria de la Fed es un tema de gran interés, ya que influye directamente en la economía, el empleo y el crecimiento.
La reducción de las tasas de interés podría ser vista como un intento de estimular la economía, especialmente en un momento en que la inflación ha comenzado a preocupar a los consumidores y a los analistas. La Fed tiene la responsabilidad de equilibrar el crecimiento económico con la estabilidad de precios, y cualquier cambio en su política puede tener efectos en cadena en los mercados financieros y en la economía en general.
La situación actual plantea preguntas sobre la dirección futura de la política monetaria en EE.UU. y cómo la administración de Trump planea abordar los desafíos económicos que enfrenta el país. La elección de un nuevo presidente para la Fed podría marcar un cambio significativo en la forma en que se manejan las políticas económicas en los próximos años, y la atención está centrada en los candidatos que podrían asumir este papel crucial.
La incertidumbre sobre el futuro de la Fed y la economía estadounidense se suma a un clima de tensión política y económica, donde las decisiones que se tomen en los próximos meses serán fundamentales para el rumbo del país. La elección del nuevo presidente de la Fed no solo afectará a los mercados financieros, sino que también influirá en la percepción de la administración de Trump y su capacidad para manejar la economía en un momento crítico.
A medida que se acercan las fechas clave para la selección del nuevo presidente de la Fed y la reunión de la entidad, el mundo financiero y político estará observando de cerca los movimientos de la administración Trump y las decisiones que se tomen en relación con la política monetaria. La combinación de un liderazgo cambiante en la Fed y la necesidad de abordar la inflación y el crecimiento económico presenta un escenario complejo que requerirá atención y análisis continuo.
