El 1 de abril de 2025, la situación del transporte ferroviario en España se ve afectada por una huelga convocada por sindicatos minoritarios de Renfe y Adif, a pesar de que el 16 de marzo se había alcanzado un acuerdo con los sindicatos mayoritarios. La Confederación General del Trabajo (CGT) ha rechazado este pacto, lo que ha llevado a la continuación de las protestas, especialmente en Sevilla y Málaga. Los manifestantes han expresado su descontento con las implicaciones del traspaso de Rodalies a la Generalitat de Catalunya, argumentando que este acuerdo podría llevar a la privatización y precarización del empleo en el sector ferroviario.
La huelga ha provocado cancelaciones y retrasos en varios trenes, afectando principalmente las conexiones de larga distancia entre Andalucía y Madrid, así como algunos servicios de Cercanías en Sevilla. Los sindicatos han organizado concentraciones en las estaciones de Santa Justa y María Zambrano, donde han denunciado las consecuencias negativas que el acuerdo podría tener para los trabajadores del sector. En su comunicado, el Sector Ferroviario de CGT ha calificado el pacto como «la vergüenza» y ha instado a los trabajadores a recordar que las promesas de continuidad a menudo terminan en privatización y desmantelamiento del servicio público.
Los trenes afectados incluyen las conexiones de AVE entre Madrid y Sevilla, así como otros servicios de media distancia. Renfe ha advertido a los viajeros sobre la posibilidad de más cancelaciones y retrasos, y ha reforzado la información disponible a través de su página web y otros canales de comunicación. Para mitigar el impacto de la huelga, el Ministerio de Transportes ha establecido servicios mínimos obligatorios, garantizando un porcentaje de funcionamiento en diferentes franjas horarias para asegurar el transporte de pasajeros.
La situación actual refleja un clima de tensión en el sector ferroviario, donde los trabajadores se sienten amenazados por posibles cambios en la gestión y estructura del servicio. La huelga, que finalizará a las 23:59 horas del mismo día, también ha llevado a la convocatoria de una nueva concentración el 3 de abril ante el Ministerio de Transportes en Madrid, donde se espera que los sindicatos continúen expresando sus demandas y preocupaciones sobre el futuro del transporte ferroviario en España.
En este contexto, los usuarios del servicio ferroviario deben estar atentos a las actualizaciones sobre el estado de los trenes y las posibles alteraciones en sus planes de viaje. La situación actual pone de manifiesto la importancia de la negociación entre sindicatos y el gobierno para garantizar un servicio público de calidad y la protección de los derechos laborales en el sector ferroviario.