El Gobierno español ha anunciado la llegada de la cuarta edición del Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC), un programa que busca impulsar la industria automotriz en el país. Este nuevo ciclo comenzará con la publicación de las bases reguladoras en el Boletín Oficial del Estado (BOE), lo que marca un paso significativo para la transformación del sector hacia la movilidad sostenible.
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, destacó que esta convocatoria contará con una dotación presupuestaria de 1.250 millones de euros. De esta cantidad, 1.000 millones se destinarán a préstamos y 250 millones a ayudas directas. Este enfoque, que prioriza los préstamos sobre las ayudas, representa un cambio respecto a ediciones anteriores, donde las empresas habían optado mayoritariamente por incentivos directos.
La competencia por acceder a estos fondos será intensa, ya que solo quedarán 250 millones de euros disponibles para atraer grandes proyectos industriales a España. En convocatorias previas, se adjudicaron importantes proyectos como las gigafactoras de baterías de Volkswagen y Envision, así como iniciativas de producción eléctrica de Stellantis y Mercedes-Benz.
Una de las principales novedades de esta cuarta edición es que la gestión del programa estará a cargo de la Sociedad Estatal de Promoción Industrial y Desarrollo Empresarial (Sepides). Esto permitirá una mayor agilidad en la implementación de las ayudas y en la promoción de la cadena de valor del coche eléctrico. Se espera que en pocas semanas se lance la sección de baterías del programa, lo que podría acelerar el desarrollo de nuevas tecnologías y proyectos en el sector.
El ministro Hereu subrayó la importancia de estos nuevos fondos para la creación de establecimientos industriales en España, así como para la ampliación de capacidades productivas existentes. Además, enfatizó la necesidad de que la industria automotriz se adapte y anticipe los cambios del mercado, con el objetivo de posicionar a España no solo como un gran productor de vehículos, sino como un líder en soluciones de movilidad avanzada.
En un contexto global marcado por la guerra arancelaria entre Estados Unidos, Europa y China, Hereu envió un mensaje de tranquilidad a la industria automotriz española, resaltando su dinamismo y competitividad. La transformación hacia la movilidad sostenible es un reto que el sector debe afrontar, y el Gobierno está comprometido en apoyar esta transición con recursos y políticas adecuadas.
La llegada de este nuevo Perte VEC es una oportunidad para que empresas como Stellantis, Renault e InoBat, entre otras, puedan desarrollar proyectos innovadores en España. La gigafactora que InoBat planea instalar en Valladolid y el megaproyecto industrial de Stellantis, que supera los 5.000 millones de euros, son ejemplos de cómo estas ayudas pueden catalizar inversiones significativas en el país.
El sector automotriz se enfrenta a desafíos importantes, pero también a oportunidades sin precedentes. La electrificación de las plantas y la producción de vehículos eléctricos son tendencias que están marcando el futuro de la industria. Con el apoyo del Gobierno y la implementación de programas como el Perte VEC, España puede consolidarse como un referente en la producción de vehículos eléctricos y en la innovación tecnológica en el ámbito de la movilidad.
En resumen, la cuarta convocatoria del Perte VEC representa un paso crucial para la industria automotriz española, ofreciendo recursos y apoyo para la transformación hacia un modelo más sostenible y competitivo. La gestión eficiente de estos fondos será clave para atraer inversiones y fomentar el desarrollo de proyectos que impulsen la economía y la sostenibilidad en el país.