En 2024, la Comunidad de Madrid ha destacado como la región líder en la construcción de vivienda protegida en España, con un impresionante 53% de las nuevas unidades iniciadas en el país. Según datos de Asprima, la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid, se han solicitado casi 23,967 calificaciones provisionales para viviendas protegidas, de las cuales 12,648 corresponden a la Comunidad de Madrid. Este aumento representa un notable incremento del 582% en comparación con el año anterior, cuando se registraron solo 1,854 viviendas protegidas en la región.
Este crecimiento sin precedentes se atribuye a las medidas implementadas por la Comunidad de Madrid en el marco del Pacto Regional por la Vivienda, que ya ha puesto en marcha ocho de sus diez medidas. Entre las iniciativas más efectivas se encuentra la actualización de los precios máximos de vivienda protegida, que entró en vigor en febrero de 2024. Además, se han establecido convenios de simultaneidad en desarrollos urbanísticos clave, como Los Ahijones y Los Berrocales, así como la ley de cambio de usos, que ha facilitado el desarrollo de vivienda protegida de alquiler en suelos que originalmente estaban destinados a otros fines.
Carolina Roca, presidenta de Asprima, ha expresado su satisfacción por estos resultados, calificándolos como «una gran noticia para el sector». Roca ha subrayado el compromiso de los promotores con la vivienda asequible en la Comunidad de Madrid y ha instado a continuar en esta dirección, eliminando las trabas burocráticas y fomentando la colaboración público-privada.
Otro dato relevante es que el 68% de las obras iniciadas en la región en 2024 son viviendas protegidas, lo que confirma el impulso estructural que está experimentando este segmento del mercado. Este fenómeno no solo refleja una respuesta a la creciente demanda de vivienda asequible, sino también un cambio en la política de desarrollo urbano en Madrid.
Sin embargo, aún quedan dos medidas por implementar del pacto, siendo la más urgente la actualización del reglamento de vivienda protegida, que actualmente se basa en una normativa de 2009. Asprima ha enfatizado la importancia de esta reforma para seguir incentivando la inversión privada en vivienda asequible, lo que podría ser crucial para mantener el ritmo de crecimiento en este sector.
La situación actual de la vivienda protegida en Madrid es un reflejo de la necesidad de soluciones habitacionales en un contexto donde la demanda supera a la oferta. La comunidad ha tomado la delantera en la creación de políticas que no solo buscan aumentar la cantidad de vivienda protegida, sino también mejorar la calidad de vida de sus residentes.
En resumen, la Comunidad de Madrid se posiciona como un modelo a seguir en la construcción de vivienda protegida, con un enfoque claro en la colaboración entre el sector público y privado. Este enfoque no solo busca satisfacer la demanda actual, sino también establecer un marco sostenible para el futuro del desarrollo urbano en la región.