La situación política en Cataluña se encuentra en un punto crítico, con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) presionando al Gobierno español para que concrete un modelo de financiación singular que permita a la comunidad gestionar su propio sistema de recaudación del IRPF. El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha manifestado su preocupación por la falta de avances en las negociaciones y ha amenazado con presentar una propuesta propia en el Congreso si no se alcanzan acuerdos satisfactorios con el PSOE.
En la antesala de una comisión bilateral entre el Gobierno y el Govern de Cataluña, Junqueras ha dejado claro que su apoyo a las iniciativas del Gobierno dependerá del cumplimiento de los compromisos adquiridos por la ministra de Hacienda. La presión de ERC se intensifica a medida que se acerca la reunión, y Junqueras ha advertido que la falta de concreciones en plazos y cifras podría llevar a su partido a distanciarse del PSOE, con quien ha mantenido una alianza desde 2018.
### La Propuesta de ERC para la Gestión del IRPF
La propuesta de ERC incluye una reforma legal que permitiría a Cataluña gestionar el IRPF, lo que implicaría modificar varias leyes, entre ellas la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca). Junqueras ha señalado que la falta de cifras claras por parte del Gobierno es uno de los principales obstáculos para avanzar en las negociaciones. La incertidumbre sobre cuántos recursos adicionales estará dispuesto a inyectar el Estado en el sistema de financiación de las autonomías es un tema candente que preocupa a ERC.
El modelo de financiación singular que se espera que se presente en la reunión del lunes se basa en el principio de ordinalidad, que establece que ninguna comunidad autónoma debe recibir menos recursos por habitante que otra que haya contribuido menos. Cataluña, que es una de las comunidades que más aporta al sistema, se encuentra en una posición delicada, ya que busca asegurar que su contribución no se traduzca en una menor financiación.
Junqueras ha enfatizado que la propuesta debe incluir un mecanismo que permita a Cataluña recaudar, gestionar y liquidar todos los impuestos de manera gradual, además de pagar al Estado por los servicios que este presta en el territorio. Sin embargo, no se espera que se presenten cifras concretas ni fórmulas de cálculo en la reunión, lo que ha generado descontento en ERC.
### La Reacción del Gobierno y el Futuro de la Negociación
El Gobierno, por su parte, ha intentado mantener una postura conciliadora, buscando un acuerdo que satisfaga tanto a ERC como a otras fuerzas políticas que podrían mostrarse reacias a un cambio en el modelo de financiación. La propuesta conjunta que se espera que se presente en la bilateral es vista como un intento de consolidar el apoyo de ERC y otros partidos como BNG o Compromís, que han mostrado reservas sobre el acuerdo.
Sin embargo, la falta de avances concretos ha llevado a Junqueras a expresar su frustración. Ha señalado que la situación actual es insostenible y que la agencia tributaria catalana, que debería tener la capacidad de gestionar la recaudación del IRPF en el próximo año, necesita una infraestructura adecuada y un aumento significativo en su plantilla. La transición hacia un sistema de recaudación autónomo es un desafío que ERC considera urgente, pero que el Gobierno parece no estar abordando con la rapidez necesaria.
Junqueras ha dejado claro que no aceptará que la agencia tributaria catalana quede subordinada a la española, lo que añade una capa adicional de complejidad a las negociaciones. La coordinación entre ambas administraciones es necesaria, pero ERC exige que la autonomía de la agencia catalana sea respetada.
La presión sobre el Gobierno también proviene de la necesidad de aprobar los presupuestos para 2026, en un contexto donde las exigencias de la Unión Europea y la OTAN para aumentar el gasto en defensa complican aún más la situación. ERC ha advertido que su apoyo a los presupuestos dependerá de la satisfacción de sus demandas en relación con la financiación y la gestión del IRPF.
En resumen, la tensión entre ERC y el Gobierno español se intensifica a medida que se acerca la reunión bilateral. La falta de concreciones y la incertidumbre sobre el futuro del modelo de financiación singular para Cataluña son temas que podrían tener un impacto significativo en la estabilidad política de la región. Junqueras ha dejado claro que su partido está dispuesto a actuar de manera independiente si no se cumplen las expectativas, lo que podría llevar a un cambio en la dinámica de poder en el Congreso y en la relación entre Cataluña y el Gobierno central.