Gijón, una joya en la costa asturiana, es un destino que combina historia, cultura y una gastronomía excepcional. Con su ambiente marinero y su rica herencia, esta ciudad ofrece una experiencia única que se puede disfrutar en un fin de semana. Desde paseos junto al mar hasta delicias culinarias, Gijón tiene algo para todos. Aquí te presentamos una guía para aprovechar al máximo tu visita, desde el viernes por la tarde hasta el domingo por la tarde.
### Primeros Pasos: Un Paseo Junto al Mar
La aventura comienza el viernes por la tarde, cuando llegues a Gijón. No hay mejor manera de iniciar tu escapada que con un paseo por la emblemática playa de San Lorenzo. Este lugar, que es el corazón de la ciudad, cuenta con un extenso paseo conocido como El Muro, que se extiende a lo largo de más de un kilómetro. Desde aquí, podrás disfrutar de las impresionantes vistas del Cantábrico y del perfil urbano de Gijón.
Cerca de la playa se encuentra Cimadevilla, el barrio más antiguo de la ciudad. Este encantador distrito, con sus calles empedradas y fachadas coloridas, es el lugar perfecto para perderse. Desde Cimadevilla, puedes subir al Cerro de Santa Catalina, donde se erige el famoso Elogio del Horizonte, una escultura de Eduardo Chillida que ofrece una vista panorámica espectacular de la costa. Si llegas a tiempo, no te pierdas el atardecer desde este punto, una experiencia que te dejará sin aliento.
### Noche de Sidra y Gastronomía Local
Al caer la noche, es hora de sumergirse en la gastronomía gijonesa. Regresa a Cimadevilla o dirígete al puerto deportivo, donde encontrarás una variedad de sidrerías y tabernas que ofrecen lo mejor de la cocina local. Prueba platos típicos como el pulpín con patatines, bocartinos fritos o el famoso pastel de cabracho. La sidra, bebida emblemática de la región, se escancia con un ritual que forma parte de la experiencia culinaria. Disfrutar de una cena en este ambiente vibrante es una forma perfecta de conectar con la cultura local.
Después de cenar, un paseo por el puerto es una excelente manera de terminar la noche. Las luces reflejadas en el agua y el sonido de las olas crean un ambiente mágico que encapsula el espíritu marinero de Gijón.
### Sábado: Historia y Cultura
El sábado comienza en el corazón del casco histórico de Gijón, en la Plaza Mayor, donde se encuentra el Ayuntamiento. Desde aquí, puedes visitar el Palacio de Revillagigedo, que alberga exposiciones temporales, y el Museo Casa Natal de Jovellanos, dedicado al famoso ilustrado gijonés. Ambos lugares son esenciales para comprender la historia y la cultura de la ciudad.
No muy lejos, las Termas Romanas de Campo Valdés son un vestigio fascinante de la antigua Gigia. Este sitio arqueológico, que data del siglo I, ofrece una visión única de la vida en la época romana. Un paseo por el Muro de San Lorenzo te llevará de regreso a la playa, donde el mar cambia de aspecto con cada hora del día, brindando un espectáculo visual constante.
### Almuerzo: Sabores del Mar
A la hora de comer, la cocina gijonesa vuelve a ser protagonista. En Cimadevilla o en el entorno del Puerto Deportivo, encontrarás numerosos locales donde degustar recetas del Cantábrico. Platos como el pixín, calamar de potera o la tradicional fabada asturiana son solo algunas de las delicias que puedes probar. La experiencia gastronómica en Gijón es tan importante como visitar sus monumentos, y cada comida es una oportunidad para disfrutar de la riqueza de la cocina asturiana.
### Tarde de Naturaleza y Cultura
La tarde del sábado es ideal para explorar un poco más allá del centro. A solo media hora en transporte público se encuentra la Universidad Laboral, una impresionante construcción de mediados del siglo XX que alberga espacios culturales y un teatro. Desde su torre, puedes obtener una vista panorámica de la ciudad y la costa.
Justo al lado, el Jardín Botánico Atlántico es un espacio verde que recrea los paisajes del norte atlántico. Con más de 25 hectáreas de senderos, zonas boscosas y áreas temáticas, es un lugar perfecto para un paseo tranquilo y relajante, lejos del bullicio urbano.
Al regresar a la ciudad, puedes dedicar tiempo a explorar las calles de Begoña, Corrida o Los Moros, donde encontrarás una mezcla de vida, comercios y terrazas llenas de movimiento.
### Noche de Sidra y Ambiente Local
La segunda noche en Gijón es otra oportunidad para disfrutar de la sidra. Las zonas de Fomento, la Cuesta del Cholo o la Plaza del Lavaderu son ideales para experimentar el ambiente local. Aquí, las sidrerías y bares ofrecen tapas, carnes y platos asturianos como el cachopo o el chorizo a la sidra. La atmósfera es alegre y auténtica, reflejando la calidez de la gente gijonesa.
### Domingo: Tradición Asturiana
El domingo comienza en el Muséu del Pueblu d’Asturies, un museo al aire libre que muestra la vida tradicional en el campo asturiano. Aquí podrás ver hórreos, aperos de labranza y una colección de fotografías antiguas que te transportarán a otra época. Muy cerca, el Muséu de la Gaita, aunque pequeño, es un lugar curioso que celebra este instrumento tan ligado a la identidad asturiana.
Después, un paseo por el Parque de Isabel la Católica, con sus estanques y aves, es una forma agradable de disfrutar de la naturaleza antes de partir. Si no tuviste la oportunidad de subir al Cerro de Santa Catalina el viernes, este es el momento perfecto para hacerlo y disfrutar de las vistas.
### Últimos Sabores antes de Partir
Antes de despedirte de Gijón, asegúrate de disfrutar de una última comida. En el centro o junto a la playa, encontrarás locales donde probar platos tradicionales como el congrio con arbeyinos o el generoso cachopo. Y no olvides dejar espacio para un dulce: el arroz con leche, la tarta gijonesa o las casadielles son clásicos que no puedes perderte.
Antes de marcharte, un último paseo por el centro histórico o el puerto deportivo te permitirá llevarte un recuerdo imborrable de esta encantadora ciudad. La ruta Gijón Goloso te invita a probar postres típicos en algunas de las confiterías más emblemáticas, y si deseas un café, el Café Dindurra es el lugar ideal para cerrar tu visita con broche de oro.