La policía de Berlín se encuentra en una intensa búsqueda de un adolescente de 13 años, quien es considerado sospechoso de apuñalar a un compañero de clase de 12 años en una escuela primaria del barrio de Spandau. El incidente ocurrió el jueves, y el agresor, tras cometer el ataque, se dio a la fuga, lo que ha llevado a las autoridades a emitir una orden de busca y captura a nivel nacional.
El ataque se produjo durante una discusión entre los dos menores, que compartían aula en la clase de sexto grado. El agresor utilizó un arma blanca para apuñalar a su víctima en el torso. El menor herido fue trasladado de urgencia a un hospital cercano, donde fue operado y, afortunadamente, se encuentra en estado estable y fuera de peligro.
La policía inició la búsqueda del adolescente fugado utilizando helicópteros y perros de rastreo, aunque estos últimos perdieron el rastro en una zona verde cercana a la escuela. Según un portavoz policial, se presume que el menor abandonó la zona inmediatamente después del ataque. La búsqueda se ha ampliado a otros estados federados, como Baja Sajonia, donde el joven tiene amigos y conocidos.
A pesar de la gravedad del incidente, las autoridades han indicado que no consideran al menor como una persona peligrosa. La policía ha solicitado la colaboración de la ciudadanía para localizar al adolescente, quien es descrito como un nuevo alumno en la escuela y que podría estar enfrentando problemas psicológicos. El arma utilizada en el ataque fue encontrada en el recinto escolar poco después de los hechos.
Desde el punto de vista legal, el caso del menor agresor ha sido asumido por el departamento de homicidios y asesinatos de la policía alemana. Sin embargo, dado que el agresor tiene solo 13 años, su acción no tendrá consecuencias penales en el sentido tradicional. En su lugar, el caso será tratado por un tribunal tutelar de menores, y es probable que el adolescente sea ingresado en un centro para menores con antecedentes de violencia.
Los padres del agresor han estado colaborando con la policía, incluso proporcionando ropa del menor para ayudar en la búsqueda. Un compañero de clase que fue testigo del ataque ha declarado que la agresión ocurrió en los vestuarios de la escuela durante una clase de educación física. Este trágico suceso ha causado una gran conmoción entre los estudiantes y sus familias, quienes se sienten inseguros tras el incidente.
La situación ha resaltado la creciente preocupación por la violencia entre jóvenes en Alemania, un tema que ha sido objeto de debate en los últimos años. La policía ha enfatizado que, aunque el caso es grave, se debe abordar con sensibilidad, dado que ambos involucrados son menores de edad.
El incidente ha generado un amplio interés mediático y ha llevado a la comunidad a reflexionar sobre la seguridad en las escuelas y el bienestar emocional de los jóvenes. Las autoridades educativas y policiales están trabajando en conjunto para abordar la situación y prevenir futuros incidentes similares.
La búsqueda del adolescente continúa, y se espera que las autoridades mantengan informada a la comunidad sobre cualquier avance en el caso. Mientras tanto, la escuela ha implementado medidas de seguridad adicionales y ha ofrecido apoyo psicológico a los estudiantes afectados por el ataque. La comunidad de Spandau se encuentra en un estado de alerta y preocupación, esperando que se resuelva esta situación de la manera más segura y rápida posible.