La empresa catalana BCN3D, conocida por su especialización en la impresión 3D, ha solicitado un concurso voluntario de acreedores mientras se encuentra en medio de una oferta de adquisición de su unidad productiva. Esta situación ha surgido tras un año financiero complicado, donde la compañía reportó ingresos de 4,4 millones de euros y pérdidas de 1,03 millones. La propuesta de compra está liderada por Francesc Adell Poch, un empresario con una sólida trayectoria en el sector de la impresión 3D y actualmente profesor en la Universitat de Lleida y en la Universitat Politcnica de Catalunya.
La oferta de Adell cuenta con el respaldo financiero de un grupo de inversores de Lleida, que incluye a las sociedades Inversions Vall 2012 y Terberfer. Estas entidades han comprometido los fondos necesarios para asegurar la viabilidad de BCN3D y mantener todos los puestos de trabajo mediante subrogación. Inversions Vall 2012 es propiedad de Alimentpecuar, cuyo único socio es Spirit Capital, la patrimonial de Oscar Vall Esquerda, miembro de la familia propietaria del grupo agroalimentario Vall Companys. Por su parte, Terberfer está administrada por Francisco Javier Farr Domingo y Maria Carmen Valenti Moreno.
La oferta presentada incluye la planta de BCN3D ubicada en el polígono Lleida Park y una oficina en Sant Feliu de Llobregat. El valor total de la adquisición se estima en poco más de un millón de euros, lo que abarca varios costos asociados, como la liberación de indemnizaciones para los trabajadores, contratos con proveedores y financiamiento para mantener la actividad hasta que se cierre la transacción. En total, se contempla un coste de amortización de 311.609 euros, 155.168 euros en contratos con proveedores, 450.000 euros para la continuidad de la actividad y 120.000 euros como precio de compra en metálico.
La propuesta de adquisición ahora debe ser aprobada por el Juzgado Mercantil, lo que marcará un paso crucial en el futuro de BCN3D. La situación actual de la empresa refleja los desafíos que enfrentan muchas startups en el sector tecnológico, donde la innovación y la sostenibilidad financiera deben ir de la mano. A medida que el mercado de la impresión 3D continúa evolucionando, la capacidad de BCN3D para adaptarse y encontrar un nuevo camino será fundamental para su éxito a largo plazo.
En un contexto más amplio, el sector de la impresión 3D ha visto un crecimiento significativo en los últimos años, impulsado por la demanda de soluciones personalizadas y eficientes en diversas industrias. Sin embargo, la competencia es feroz, y las empresas deben ser ágiles y estratégicas para sobrevivir. La experiencia de Adell en el ámbito académico y empresarial podría ser un factor determinante para revitalizar BCN3D y llevarla a nuevas alturas.
La comunidad empresarial de Lleida y más allá estará atenta a los desarrollos en torno a esta oferta de adquisición, ya que el éxito de esta operación podría sentar un precedente para otras empresas en situaciones similares. La capacidad de los inversores para proporcionar el capital necesario y la experiencia de Adell en el sector serán cruciales para asegurar la continuidad de BCN3D y la preservación de los empleos de sus trabajadores.
En resumen, la situación de BCN3D es un reflejo de los desafíos y oportunidades que enfrenta el sector de la impresión 3D. Con una oferta de adquisición en marcha y el respaldo de inversores locales, la empresa tiene la oportunidad de reestructurarse y adaptarse a un mercado en constante cambio. La aprobación del Juzgado Mercantil será un paso clave en este proceso, y el futuro de BCN3D dependerá de su capacidad para navegar por estos tiempos inciertos y encontrar su lugar en el competitivo mundo de la impresión 3D.