El proceso de negociación entre los socialistas y ERC para establecer un nuevo modelo de financiación para Cataluña ha tomado un rumbo decisivo. Oriol Junqueras, presidente de ERC, ha concedido un margen adicional al Gobierno para que presente un acuerdo formal antes del 14 de julio. Este pacto es crucial, ya que busca transformar la relación fiscal entre la Generalitat y el Estado, permitiendo que Cataluña gestione sus propios impuestos, un objetivo histórico del nacionalismo catalán.
Las conversaciones han estado marcadas por la necesidad de un modelo de financiación «bilateral» que permita a Cataluña salir del régimen federal actual. Este nuevo enfoque implica el traspaso de la recaudación e inspección de impuestos, que actualmente están bajo la gestión de la Agencia Tributaria, a la hacienda de la Generalitat. La Generalitat ha confirmado que la reunión para formalizar este acuerdo se llevará a cabo el 14 de julio, aunque aún quedan detalles por cerrar.
Junqueras ha enfatizado que, más allá de los plazos, lo que realmente importa es que el contenido del acuerdo cumpla con las expectativas de ERC. En el pasado, el partido había condicionado su apoyo a la investidura de Salvador Illa a la presentación de un nuevo modelo de financiación antes del 30 de junio. Sin embargo, el presidente de ERC ha mostrado flexibilidad, sugiriendo que si el PSOE necesita más tiempo, puede tomarlo.
Este nuevo modelo de financiación busca equiparar a Cataluña con los territorios forales en términos de recursos a medio plazo. La demanda de acabar con el «déficit fiscal» ha sido una constante en el discurso nacionalista, y algunos sectores han utilizado términos como «expolio» para describir la situación actual. La frase «España nos roba» ha resonado en el imaginario colectivo catalán, reflejando el descontento con el sistema vigente.
El PSC, por su parte, se ha visto obligado a modificar su postura y aceptar un modelo de financiación «bilateral». Este cambio es significativo, dado que en campañas electorales anteriores había defendido un modelo de «Hacienda federal». Este sistema ya fue contemplado en la reforma del Estatut de 2006, pero nunca se implementó. Los expertos advierten que no es lo mismo un consorcio tributario donde ambas haciendas están representadas que un traspaso total de funciones de la Agencia Tributaria a la Generalitat.
Una de las principales demandas de ERC es el refuerzo de la hacienda catalana, que actualmente solo gestiona tributos propios y cedidos. El primer impuesto que la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC) asumirá será el IRPF, y su implementación está prevista para la campaña de 2025. Sin embargo, tanto las fuerzas de derecha como los inspectores de Hacienda han expresado preocupaciones sobre las consecuencias de este cambio, advirtiendo que la ATC podría no contar con los recursos y la tecnología necesarios, lo que podría aumentar el fraude fiscal.
Cualquier reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) requerirá el apoyo del Congreso. Los socialistas deberán unir a todas las formaciones que respaldaron la investidura, incluyendo a partidos como CHA, BNG o Compromís, que también exigen más recursos para sus territorios. Además, el apoyo de Junts será crucial, ya que aunque actualmente apoyan al Gobierno en el Congreso, están en una oposición dura a nivel local y autonómico.
Junts ha dejado claro que utilizará su peso político en el Congreso, donde cuentan con siete escaños, para influir en la aprobación del nuevo modelo de financiación. Sin embargo, la relación entre Junts y ERC es tensa, y la posibilidad de que Junts eleve sus demandas a cambio de facilitar la aprobación del texto es una incógnita que podría complicar aún más el proceso.
En resumen, el avance hacia un nuevo modelo de financiación para Cataluña está en marcha, pero las negociaciones siguen siendo complejas y están sujetas a múltiples factores políticos. La fecha del 14 de julio se presenta como un hito clave en este proceso, donde se espera que se formalicen los acuerdos alcanzados entre los socialistas y ERC.
