La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ha realizado una revisión significativa de sus proyecciones de crecimiento económico para España, elevando sus expectativas para el Producto Interno Bruto (PIB) en los próximos años. En un reciente informe, la presidenta de la Airef, Cristina Herrero, anunció que la previsión de crecimiento para 2025 ha sido ajustada del 2,3% al 3%, mientras que para 2026 se ha incrementado del 1,7% al 2,1%. Esta revisión se produce en un contexto donde se han despejado algunos de los riesgos más preocupantes que amenazaban la economía española, especialmente en relación con las tensiones comerciales internacionales.
El cambio en las proyecciones se debe, en parte, a la mejora en el entorno comercial global y a un aumento en la demanda interna. Herrero destacó que la fortaleza de la demanda interna ha sido impulsada por un flujo migratorio más elevado de lo esperado, lo que ha contribuido a un mayor consumo y actividad económica. Sin embargo, a pesar de estas mejoras, la Airef también advierte sobre una posible desaceleración del crecimiento a medio plazo, proyectando que la tasa de avance del PIB podría caer al 1,5% para 2030. Esta desaceleración se atribuye a varios factores, incluyendo el agotamiento de los fondos europeos, un menor dinamismo en el sector turístico y una normalización de los flujos migratorios.
En cuanto a las previsiones de déficit, la Airef ha mejorado sus estimaciones para 2025 y 2026, situándolas en un 2,5% y un 2%, respectivamente. Este cambio se debe a un aumento en los ingresos fiscales, resultado de la eliminación de las rebajas fiscales implementadas durante la crisis energética, así como a la reforma fiscal y la evolución de las cotizaciones. Sin embargo, se anticipa que a partir de 2026, el déficit comenzará a aumentar nuevamente debido a un mayor gasto público relacionado con el envejecimiento de la población, la defensa y el incremento de los intereses de la deuda.
Uno de los puntos críticos que la Airef ha señalado es la dificultad de cumplir con las reglas fiscales tanto a nivel nacional como europeo. Herrero indicó que existe una dificultad generalizada para cumplir con la regla de gasto nacional, especialmente en la Administración General, que se encuentra en una situación límite para 2026. Para cumplir con los objetivos fiscales en 2025, se requerirán medidas de ajuste por un total de 12.000 millones de euros, además de ajustes adicionales en 2026.
La falta de un proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2026 también ha sido un tema de preocupación. La presidenta de la Airef subrayó que esta ausencia dificulta la evaluación de la estabilidad fiscal y la regla de gasto, lo que limita el control parlamentario sobre las orientaciones del Gobierno. En el ámbito de las comunidades autónomas, aunque se han presentado algunas líneas presupuestarias, la falta de un plan presupuestario ante las instituciones europeas por segundo año consecutivo plantea serias dudas sobre la capacidad del Gobierno para cumplir con sus compromisos fiscales.
La Airef también ha advertido que el incumplimiento de los compromisos fiscales europeos dependerá de si se superan ciertos límites establecidos en las cuentas de control. Actualmente, existe un saldo positivo en esta cuenta, lo que podría facilitar el cumplimiento en 2025 y 2026, pero se anticipa que serán necesarias medidas adicionales en 2027 y 2028 para cumplir con los compromisos europeos.
En resumen, la revisión al alza de las proyecciones del PIB por parte de la Airef refleja un contexto económico más favorable, aunque también pone de manifiesto los desafíos que enfrenta España en términos de cumplimiento fiscal y la necesidad de un marco presupuestario claro. La situación actual exige atención y acción por parte del Gobierno para garantizar la estabilidad económica y cumplir con los compromisos tanto a nivel nacional como europeo.
