Marsella, la segunda ciudad más grande de Francia, se enfrenta a una crisis sin precedentes debido a un incendio forestal que comenzó el martes por la mañana. Este devastador evento ha dejado más de 100 personas heridas, la mayoría de ellas bomberos y policías que han estado en la primera línea de combate contra las llamas. Las autoridades han ordenado la evacuación de más de 400 residentes de las áreas afectadas, mientras los equipos de emergencia luchan por controlar el fuego que ha arrasado ya 750 hectáreas de terreno.
El ministro del Interior francés, Bruno Retailleau, se trasladó a Marsella para evaluar la situación y coordinar los esfuerzos de respuesta. Durante la noche, cerca de 800 bomberos, apoyados por varios hidroaviones, trabajaron incansablemente para extinguir el fuego. A pesar de sus esfuerzos, el incendio sigue activo y se han reportado nuevos focos de llamas, lo que ha llevado a las autoridades a mantener un alto nivel de alerta. El prefecto de la región, Georges-François Leclerc, advirtió que aunque el incendio está remitiendo, la magnitud del mismo podría provocar rebrotes.
La situación ha sido descrita por el alcalde de Marsella, Benoît Payan, como una «guerra de guerrillas», dado que el fuego se propagó a una velocidad alarmante de 1,2 kilómetros por minuto en su punto más crítico. Las condiciones meteorológicas han complicado aún más la situación, con vientos que podrían intensificarse nuevamente, lo que representa un riesgo para los esfuerzos de control del incendio. Por ello, se ha decidido mantener un dispositivo de al menos 400 bomberos en el terreno para prevenir que las llamas se reaviven.
**Reanudación del Tráfico Aéreo y Terrestre**
A pesar de la crisis, el Aeropuerto de Marsella-Provenza ha anunciado la reanudación total del tráfico aéreo, después de haber reiniciado parcialmente sus operaciones el martes por la noche. Sin embargo, un portavoz del aeropuerto ha advertido que la situación podría cambiar dependiendo de las necesidades del tráfico aéreo para combatir el incendio. En las carreteras, se espera que el tráfico se reanude completamente a lo largo de la mañana del miércoles, especialmente en la autopista A55 hacia Marsella y en dirección contraria. La autopista A7 también verá la habilitación de dos carriles para servicios de emergencia en dirección Lyon-Marsella, según lo anunciado por la prefectura de la región.
En cuanto al transporte ferroviario, la estación central de Marsella ha reanudado sus operaciones, aunque el servicio de TER en la línea Marsella-Miramas permanecerá interrumpido hasta el mediodía, afectando las rutas de la Côte Bleue y Rognac. Esta interrupción ha causado inconvenientes a muchos viajeros que dependen del tren para sus desplazamientos diarios.
**Incendios en Otras Regiones**
No solo Marsella está sufriendo las consecuencias de los incendios forestales. En Narbona, un incendio declarado el lunes sigue activo, y las condiciones meteorológicas no han favorecido las labores de extinción. El prefecto de Aude ha informado que los incendios se reavivaron durante la noche del martes, aunque están bajo control. Decenas de bomberos continúan trabajando en la zona, apoyados por dos hidroaviones que ayudan a combatir las llamas desde el aire.
La situación en ambas regiones pone de manifiesto la creciente amenaza de los incendios forestales en Francia, exacerbada por las condiciones climáticas extremas. Las autoridades están en alerta máxima y han instado a la población a seguir las instrucciones de evacuación y a mantenerse informados sobre la evolución de la situación. La comunidad de Marsella, conocida por su resiliencia, ahora enfrenta un desafío monumental mientras se esfuerzan por recuperar la normalidad en medio de esta crisis devastadora.