La televisión pública española, RTVE, se encuentra en el centro de una polémica tras la decisión del programa ‘La familia de la tele’ de enviar a su reportera Marta Riesco a Roma para cubrir la elección del nuevo papa, León XIV. Este hecho ha suscitado críticas por parte del Consejo de Informativos de TVE, que ha expresado su preocupación sobre cómo esta acción podría afectar la credibilidad de los servicios informativos de la cadena. La controversia pone de relieve la delgada línea que separa el entretenimiento de la información en la televisión pública.
La decisión de enviar a Riesco a un evento de tal magnitud ha sido calificada por el Consejo de Informativos como inapropiada, argumentando que el tono y la forma del programa no son los esperados en una cobertura informativa seria. En un comunicado emitido el 9 de mayo de 2025, el consejo instó a la presidencia de RTVE a tomar medidas para evitar que el programa merme la credibilidad de la cadena. Según el consejo, los profesionales de la información de RTVE han estado trabajando arduamente en Roma, proporcionando una cobertura seria y rigurosa del cónclave, y merecen respeto por su labor.
### La crítica del Consejo de Informativos
El comunicado del Consejo de Informativos no solo critica la decisión de enviar a Riesco, sino que también resalta la importancia de mantener una clara distinción entre el entretenimiento y la información en la televisión pública. Este consejo, que representa a los profesionales de la información de RTVE, enfatiza que la credibilidad de la cadena es fundamental para su imagen de marca y su función de servicio público.
El consejo argumenta que el uso del micrófono de RTVE por parte de un programa de entretenimiento en un evento informativo tan significativo como la elección de un nuevo papa puede confundir a la audiencia y perjudicar la percepción que tienen del medio. La crítica se centra en que el enfoque de ‘La familia de la tele’ no se alinea con los estándares de seriedad que se esperan en la cobertura de eventos de esta naturaleza.
Además, el consejo ha elogiado a los periodistas que han estado cubriendo el cónclave, destacando su dedicación y profesionalismo. En su comunicado, se menciona que la dirección de RTVE ha reaccionado adecuadamente al interrumpir la programación para dar paso a los servicios informativos, lo que demuestra un compromiso con la calidad informativa.
### La cobertura de Marta Riesco
La conexión de Marta Riesco desde el Vaticano ha sido objeto de controversia no solo por su presencia en un evento informativo, sino también por el contenido de su cobertura. Durante su intervención, Riesco se limitó a resumir brevemente la situación del cónclave y a entrevistar a un grupo de monjas sobre sus expectativas y el papel de la mujer en la iglesia. Aunque su enfoque no fue humorístico, la naturaleza del programa en el que trabaja ha llevado a cuestionar la idoneidad de su participación en un evento tan serio.
La cobertura de ‘La familia de la tele’ incluyó un reportaje grabado en Roma sobre la sastrería histórica que confecciona los trajes papales, lo que ha sido interpretado por algunos como un intento de mezclar entretenimiento con información seria. Esta mezcla ha generado descontento entre los profesionales de la información de RTVE, quienes consideran que la televisión pública debe mantener un estándar elevado en su cobertura informativa.
La controversia también ha sido respaldada por figuras destacadas de RTVE, como las periodistas María Escario y Ángeles Caso, quienes han expresado su desacuerdo con la emisión de un programa de entretenimiento en un contexto informativo. Sus críticas se suman a la preocupación general sobre la dirección que está tomando la televisión pública en España y la necesidad de preservar su integridad informativa.
En medio de esta polémica, se plantea un debate más amplio sobre el futuro de la televisión pública y su capacidad para equilibrar el entretenimiento y la información. La situación actual en RTVE podría ser un reflejo de las tensiones que enfrentan muchas cadenas de televisión en la era digital, donde la línea entre el contenido informativo y el entretenimiento se vuelve cada vez más difusa. La respuesta de RTVE a estas críticas y la forma en que maneje la situación podría tener un impacto significativo en su reputación y en la confianza del público en sus servicios informativos.