La sonda espacial Lucy de la NASA está en una emocionante misión para explorar los asteroides troyanos, cuerpos celestes que orbitan alrededor del Sol en la misma trayectoria que Júpiter. Este ambicioso proyecto tiene como objetivo estudiar la composición y características de estos asteroides, que son considerados fósiles de la formación del sistema solar. El próximo 20 de abril, Lucy se acercará al asteroide troyano Donaldjohanson, un evento que promete aportar valiosa información sobre la historia del espacio y la evolución de los planetas.
### Un Encuentro Esperado: Lucy y Donaldjohanson
La sonda Lucy, lanzada el 16 de octubre de 2021, ha estado en un viaje interplanetario que la llevará a realizar múltiples acercamientos a asteroides troyanos. En su próxima misión, se espera que Lucy se encuentre con Donaldjohanson a las 19:51 hora española peninsular, a una distancia de aproximadamente 960 kilómetros. Este asteroide es particularmente interesante porque es un fragmento de una colisión que ocurrió hace 150 millones de años, lo que lo convierte en uno de los cuerpos celestes más jóvenes del cinturón principal.
Durante el acercamiento, Lucy utilizará tres instrumentos científicos avanzados para capturar imágenes y analizar la composición de Donaldjohanson. Estos instrumentos incluyen el generador de imágenes en escala de grises de alta resolución L’LORRI, el generador de imágenes en color y espectrómetro infrarrojo L’Ralph, y el espectrómetro de infrarrojo lejano L’TES. Sin embargo, para proteger sus delicados instrumentos de la intensa luz solar, Lucy dejará de rastrear al asteroide 40 segundos antes del acercamiento más cercano.
El líder de la fase de encuentro, Michael Vincent, ha explicado que los instrumentos de la sonda están diseñados para operar en condiciones de luz mucho más tenue que la que se experimenta en la Tierra. Por lo tanto, mirar directamente hacia el Sol podría dañar las cámaras y afectar la calidad de los datos que se obtendrán. Una vez que el acercamiento haya concluido, Lucy reorientará sus paneles solares hacia el Sol y restablecerá la comunicación con la Tierra, un proceso que tomará aproximadamente una hora.
### La Misión Lucy: Un Viaje de Descubrimiento
La misión Lucy es la primera de su tipo en explorar los asteroides troyanos de Júpiter, una población diversa de cuerpos celestes que se cree que contienen información crucial sobre la formación del sistema solar. A lo largo de su misión de doce años, Lucy tiene programado sobrevolar un total de 11 asteroides, incluyendo tres en el cinturón de asteroides y ocho troyanos. Este enfoque permitirá a los científicos obtener una visión más completa de la composición y evolución de estos cuerpos celestes.
Además de su misión principal, Lucy también realizará tres sobrevuelo de la Tierra para aprovechar su gravedad y propulsarse hacia su próximo destino. Este aspecto de la misión es particularmente interesante, ya que será la primera vez que una nave espacial regrese a las proximidades de nuestro planeta desde el sistema solar exterior. La trayectoria de Lucy ha sido cuidadosamente diseñada para garantizar que no impacte con la Tierra ni contamine lugares que podrían albergar indicios de vida durante más de 100,000 años.
La NASA ha destacado la importancia de esta misión, ya que los asteroides troyanos son considerados cápsulas del tiempo que pueden ofrecer pistas sobre la formación de los planetas y la evolución del sistema solar. Al estudiar estos cuerpos celestes, los científicos esperan obtener información que pueda ayudar a responder preguntas fundamentales sobre la historia de nuestro sistema solar y, potencialmente, sobre la vida en otros lugares del universo.
La sonda Lucy continuará su viaje hasta el 3 de marzo de 2033, cuando se espera que complete su último acercamiento con un asteroide troyano. A medida que avanza en su misión, los datos recopilados por Lucy serán enviados a la Tierra, donde los ingenieros y científicos los analizarán para desentrañar los misterios que estos antiguos cuerpos celestes tienen para ofrecer.
La misión Lucy no solo representa un avance significativo en la exploración espacial, sino que también simboliza el ingenio humano y la curiosidad por entender nuestro lugar en el cosmos. A medida que nos acercamos al encuentro con Donaldjohanson, la comunidad científica y el público en general esperan con ansias los descubrimientos que esta sonda puede traer, abriendo nuevas puertas al conocimiento sobre el universo que nos rodea.